Detalle
Título: "Niños cosechando algodón" óleo sobre tela 60 x 59 cm. año: 2006
Caminando las calles de la gran ciudad y los caminos rurales, veo con pesar los niños que se desempeñan en distintos trabajos como cosecheros de frutos de la tierra o bien como vendedores, cartoneros, malabaristas, mendigos...
Panchito, no es un niño imaginario, es un pequeño niño argentino que camina las calles y rutas de mi país, los basurales extra muros de las ciudades, es el niño que la sociedad moderna, la economía y sus organizaciones han dejado fuera del sistema. Hoy, ellos son sólo un índice que engrosa los porcentajes de las frías estadísticas que otorgan soporte técnico para delinear las políticas de algunos gobernantes, incapaces de abordar con seriedad y responsabilidad esta temática tan sensible como es el trabajo infantil, dañando y poniendo en peligro la salud mental , fisica y emocional de nuestra niñez.
Panchito, no es un niño imaginario, es un pequeño niño argentino que camina las calles y rutas de mi país, los basurales extra muros de las ciudades, es el niño que la sociedad moderna, la economía y sus organizaciones han dejado fuera del sistema. Hoy, ellos son sólo un índice que engrosa los porcentajes de las frías estadísticas que otorgan soporte técnico para delinear las políticas de algunos gobernantes, incapaces de abordar con seriedad y responsabilidad esta temática tan sensible como es el trabajo infantil, dañando y poniendo en peligro la salud mental , fisica y emocional de nuestra niñez.
El trabajo infantil rompe y astilla la infancia, destroza sus ilusiones e impide el desarrollo personal pleno, priva de toda posibilidad afectiva, educativa y de una verdadera integración a la sociedad.
Yo tengo una Ilusión; una esperanza; un anhelo... la misma que Panchito, erradicar el trabajo infantil y que las políticas se adecúen para que se hagan realidad los "Derechos fundamentales de la ninez"
M.L
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